Finalmente estamos de vacaciones !!! Y es normal y además recomendable, que rompamos nuestra rutina, modifiquemos nuestros horarios, cambiemos el ritmo y nos permitamos ciertas concesiones a nivel alimentario y físico.
Lo importante es disfrutar y tomar ciertas precauciones que no nos permitan olvidar que nuestro organismo ya está habituado a un orden en el que hemos estado trabajando en familia, por lo que si bien vamos a probar nuevos platos, cambiaremos de ambiente, dormiremos más (o menos), nos expondremos más al sol o al agua, debemos cuidar nuestros hábitos alimentarios y de vida:
1. Intenten comer a la misma hora

No importa si se levantan más tarde o estan lejos de casa, intenten mantener sus horarios de comidas para que su metabolismo funcione bien y se mantenga activo. Garanticen un buen desayuno ya que es la comida que más podemos controlar y asegúrense de que sea rica en nutrientes.
2. NO repitan y respeten las porciones
3. Limiten los alimentos procesados, ricos en azúcares y grasas
Escojan las opciones más saludables (pan integral, leche descremada, preparaciones a la plancha, al vapor u horneadas). Eviten frituras, empanizados, postres a diario, jugos pasteurizados.
4. Promueve la ingesta de frutas y vegetales a diario

Aunque suene muy repetitivo, mantener este hábito los ayudará no solo a garantizar el consumo adecuado de vitaminas y minerales, sino a estar hidratados y satisfechos por más tiempo. Sean creativos y prueben nuevas preparaciones, sabores y presentaciones.
5. Tengan a mano meriendas saludables
Este consejo puede ser demasiado útil, cuando los recorridos por tierra o por aire son largos o si simplemente estamos en casa. Calmen su ansiedad con: frutos secos (maní, almendras, pasas, orejones), frutas, yogurt bajo en grasas, galletas de avena, sanduches de atún, huevos duros, cotufas, untable de aguacate con galletas saladas, unas «señoritas» con palitos de queso.
6. Planea actividades con movimiento

Hagan actividades como: caminar, recorrer lugares turísticos en bicicleta, nadar, jugar futbol con los amigos, ejercitarse en el parque y todo lo que los obligue a realizar un esfuerzo físico. Así permanecerán activos. Luego, no olviden un merecido descanso nocturno.
7. Cocinen juntos
Aprovechen el tiempo libre que tendrán para innovar, hacer platos nuevos, buscar recetas en internet. Dejen que su imaginación vuele y decoren su comida; por ejemplo, pueden hacer pancakes y decorarlas a su gusto con algunas frutas o chispas de chocolate. Al cocinar juntos no solo aprovechamos el momento para estar en familia y fortalecer el vínculo familiar, sino que les enseñamos una habilidad que les servirá para toda la vida, hará más fácil el aprender a comer y cocinar en forma saludable y les permitirá adquirir hábitos alimentarios adecuados.
7. Compartan
Si van a comerse un postre, compártanlo y disfrútenlo en familia.
8. Tomen agua

El agua es fundamental para el buen funcionamiento del cuerpo porque nos ayuda a mantenernos hidratados y a eliminar toxinas. Es recomendable tomar agua entre, antes y durante las comidas. Muchas veces la sed se suele confundir con hambre, así que es bueno beber agua si sientes hambre.
Disfrutemos sin excesos ! Nos mantenemos en contacto y si te gustó, dale like o comparte.